La Puccapedia es una enciclopedia libre, perruna y elaborada por la Spaniel Bretón. Es administrada y escrita por Pucca y supervisada por Núvol. Sus artículos son explicaciones de conceptos imprescindibles en la vida de suBebé. Se inició el 30 de mayo de 2013 y pronto se hará imprescindible. Va a acabar siendo la mayor y más popular obra de Pucca por Internet.
San Juan
San Juan es una fiesta de origen pagano que conmemora el principio del verano. Es tradición hacer hogueras para quemar lo viejo o lo indeseado; también se ameniza con petardos (el mal), bailes y coca.
Odio San Juan. Sí, ya sé que odiar no va conmigo, pero es que odio los petardos. Hacen ruido y me asusto, pero como soy una perra valiente, no huyo a esconderme, sino que ladro muy fuerte para hacer más ruido que ellos. Lo que pasa es que a los humanosdemialrededor no les gusta; si ya no les gustaba el año pasado sin miBebé, imagináos ahora...
¿Qué hacen? Pues intentan tranquilizarme. El año pasado, el veterinario recetó a laAmita que me diese Tranquimazin de 1 mg cada ocho horas durante tres días. Lo mejor fue que el veterinario consideró que si ella era maestra ya debía tener esas pastillas en casa, pero no. Quizá en algunos compañeros de profesión vienen de serie... Esta solución no sirvió para nada. Yo ladré de forma desesperada hasta las 2 de la madrugada de la noche del 23 hasta que me dormí afónica.
Este año ella continuó con la estrategia, pero cambió el contenido de los tranchetes (a mí las pastillas me las dan envueltas en una sabanita de queso, ¿a ti no?) Esta vez me dio Calmivet que es lo que tomaba Núvol para viajar en avión. Fue mejor. Ladré, pero menos y sólo hasta las 11 y media cuando me quise ir a dormir a la misma habitación que miBebé para protegerla. Allí, ni medio ladrido.
Ahora, sólo queda vivir feliz hasta el siguiente petardeo que en Gijón se conoce como el Día de los Fuegos en el que laMamádemiBebé pretende no estar allí para que yo no sufra...
¿Qué hacen? Pues intentan tranquilizarme. El año pasado, el veterinario recetó a laAmita que me diese Tranquimazin de 1 mg cada ocho horas durante tres días. Lo mejor fue que el veterinario consideró que si ella era maestra ya debía tener esas pastillas en casa, pero no. Quizá en algunos compañeros de profesión vienen de serie... Esta solución no sirvió para nada. Yo ladré de forma desesperada hasta las 2 de la madrugada de la noche del 23 hasta que me dormí afónica.
Este año ella continuó con la estrategia, pero cambió el contenido de los tranchetes (a mí las pastillas me las dan envueltas en una sabanita de queso, ¿a ti no?) Esta vez me dio Calmivet que es lo que tomaba Núvol para viajar en avión. Fue mejor. Ladré, pero menos y sólo hasta las 11 y media cuando me quise ir a dormir a la misma habitación que miBebé para protegerla. Allí, ni medio ladrido.
Ahora, sólo queda vivir feliz hasta el siguiente petardeo que en Gijón se conoce como el Día de los Fuegos en el que laMamádemiBebé pretende no estar allí para que yo no sufra...