jueves, 26 de septiembre de 2013

Bebés adictos

Ahí va un post que hace tiempo debía escribir y nunca lo hacía. Lo reconozco: nosotros hicimos a laBebé adicta a algo (o más bien nosotros nos hicimos adictos a algo para laBebé).

Me explico y así acabo con la polémica:


Ya expliqué que ella tuvo MUCHOS cólicos, pero MUCHOS MUCHOS. Y entre las tropecientas mil cosas que probamos, una de ellas fue el Colikind.

Había que administrárselo veinte minutos antes de comer y en un bebé de menos de dos meses, eso nunca se sabe cuándo es. Yo le daba las bolitas a la primera impresión de demanda y después rezaba porque pasaran los minutos y poderle dar de comer. Pero fui observando que cuando se lo daba, se calmaba un rato y se volvía a dormir; a veces, de noche, una hora hasta pedir comida.

Yo que soy suspicaz (pero no lista) lo empecé a aprovechar para dárselo antes de acostarla. Las bolitas son dulces y el hecho de succionar con el chupete y encontrar sabor, la calmaba y se dormía. Como no tengo fin, también lo usaba si lloraba por la calle. Llevaba el botecito a todos sitios y los gastábamos con frecuencia.

Los cólicos se fueron antes de los tres meses, pero el Colikind se quedó, ya había encontrado un hueco en la familia. Los amigos y familiares ya lo conocían y le llamaban lasbolitasesasmágicas.

Pero elPapá y yo somos algo responsables y sabíamos que aquello debía terminar. Nos pusimos como fecha
el viaje a Barcelona en junio y así fue. Ya no tomó más bolitas. Ni las pidió ni se acordó.

Cuando debatimos o alguien nos dijo que se haría adicta, yo lo tenía muy claro y siempre lo dije: los adictos somos los padres que hacemos esto para que no llore...

En casa aún hay un bote de Colikind entero, abandonado a su suerte. Si alguien lo quiere, se lo envío ;)



En la imagen: lo que podría haber sido laBebé si nos descuidamos.



6 comentarios:

¡Me encanta leer comentarios!

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...